Cómo lograr que tu perro sea feliz

 

Escrito por Mari Carmen Pérez, Educadora.

Es importante saber que los perros, por naturaleza, son felices. Saben disfrutar de detalles insignificantes para nosotros, quienes solemos enfocar nuestra atención en cosas que al final nos hacen perder el tiempo y generan enfermedades como depresión, estrés, ataques de ansiedad, etc. Es la consecuencia de ser seres racionales, por eso siempre animo a todos a que seamos un poco más “perros”.

Pero, aunque el perro sea feliz por naturaleza, la convivencia con seres humanosa veces coarta este estado: muchos son maltratados físicamente, algunos esotán atados toda su vida, la mayoría sufren ansiedad, un gran número es cebado a caprichos que les provoca obesidad, etc.

Las claves para tener un perro feliz son:

  • Permite a tu perro que haga actividad física: La gran mayoría de los problemas de conducta de un perro se debe a la falta de ejercicio físico. Que un perro ladre en exceso, haga destrozos en casa, se dedique a hacer hoyos en el jardín, rasque las puertas o se coma las paredes es consecuencia de un estado de ansiedad grave por falta de ejercicio físico. En la naturaleza del perro está implícito el no parar durante todo el día, pueden andar hasta 100 km diarios, pero cuando un perro convivive con las personas y se ve encerrado entre cuatro paredes, la realización de ejercicio físico es casi imposible. Por tanto, infórmate sobre el nivel de energía de tu perro (cada raza tiene un nivel de energía diferente) y adáptate a sus necesidades.

  • Permite que tu perro se socialice: Este punto es fundamental, no hay que errar. Entre los 2 y los 4 meses de edad, debes permitir a tu cachorro relacionarse con todo tipo de personas, perros y si quieres hasta otros animales. Esta etapa se llama periodo de socialización y es el momento clave en el que el cachorro está más sensible a las interacciones con su entorno. De realizarlas o no, así como la calidad de las mismas, se desarrollará su futura personalidad. Es decir, si el cachorro interactúa con su entorno entre los 2 y los 4 meses de forma positiva, relacionándose con todo tipo de personas, perros, está expuesto a todo tipo de sonidos, etc. y estas interacciones son positivas, no tengas ninguna duda de que tu perro en el futuro será un perro sociable con el que podrás ir a cualquier lado sin preocupaciones. De forma opuesta, si no permites que tu cachorro a esa edad interactúe libremente, desarrollará una personalidad temerosa, agresiva o antisocial. ¿Ya ha pasado esta etapa y no actuaste como debieras? No te preocupes: terapia de choque. Empieza ahora, tenga el perro la edad que tenga. Te va a costar muchísimo más, pero nada que no solucione unos paseos diarios en una manada equilibrada con otros perros.

  • Diviértete con tu perro, juega con él, estimula su mente: los perros son muy divertidos y les encanta jugar. Descubre qué juegos le gustan más y varía: pelotas, esconderse, juegos con agua, juegos interactivos o trucos. Practica también ejercicios de obediencia básica para estimular su mente, enséñale diariamente en sesiones de no más de 5 minutos a sentarse, dar la pata, tumbarse, etc.

  • Permítele explorar: no hay nada que le guste más a un perro que explorar, descubrir, y cómo no, marcar todo lo que encuentre. Evita ir siempre con tu perro a los mismos sitios, varía en los entornos: tu barrio lo ve cada día, así que cambiad diariamente de ruta por tu ciudad, y en fin de semana, apuesta por otros entornos como el bosque, el campo, la playa, la montaña, etc. Y si eres de los que tiene un perro en el jardín, te equivocas al pensar que tu perro tiene suficiente espacio: ¿No se te ha escapado nunca? Por mucha parcela que tenga un perro, siempre va a necesitar explorar y descubrir nuevos sitios, así que no se lo prives.

  • Educación,es la base: un perro educado con las normas claras del qué poder hacer y el qué no poder hacer es sin duda un perro más feliz. Para ello, toda la familia en la que vive el perro debe darle siempre las mismas órdenes. Si no se le permite nunca entrar, por ejemplo, a la cocina, nadie puede hacer una excepción, de lo contrario, el perro se va a confundir, desarrollando estrés.

  • Permite a tu perro que te acompañe siempre que pueda: los perros necesitan estar con su manada siempre, por eso, deja que tu perro te acompañe en la medida de lo posible: a tomar algo con tus amigos en una terraza, a comprar, a la casa de algún familiar o amigo, etc, esto también fomenta el su socializacion.

  • Mantén una calidad de vida alta: cuida su alimentación, su higiene y respeta las visitas al veterinario. Que tu perro se encuentre bien, fuerte y sano, depende mucho de estos tres puntos.

  • Nunca humanizar: no humanices a tu perro, no es una persona, por tanto, cambia el chip y no lo trates como si fuera un niño. Es un perro y como tal, debes respetarle, debes conocer su lenguaje y códigos sociales, y saber que quiere comunicarte en su propio lenguaje.

Y en definitiva, paciencia, comprensión y mucho cariño.

Fte: dogeando.com